El derecho al olvido es una norma que permite a los ciudadanos solicitar a los motores de búsqueda la eliminación de determinados enlaces que atenten contra nuestra privacidad o libre ejercicio de los derechos fundamentales. Se considera que la misma se deriva de una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea publicada en Mayo de 2014 poniendo fin al conocido como “caso Costeja”.
Este ciudadano español solicitaba a Google la supresión de algunos enlaces que apuntaban a informaciones sobre unos problemas que tuvo con la seguridad social y que aparecían entre los primeros resultados al hacer una búsqueda por su nombre.
El TJUE otorgó la razón a este ciudadano, al considerar que los gestores de los motores de búsqueda son responsables del tratamiento de datos de terceros que aparecen en sus páginas de resultados reconociendo, por tanto, el derecho al olvido en Internet.
Pero ¿y si este derecho ya se hubiera reconocido antes? Y, además, ¿fuera de Europa?
El derecho al olvido antes del derecho al olvido
En 2007 varias modelos y personalidades públicas argentinas emprendieron una batalla legal contra Google y Yahoo Argentina solicitando la eliminación de ciertos resultados arrojados por los motores de búsqueda al introducir sus nombres. Una batalla judicial con la que consiguieron que la justicia del país sudamericano les otorgara la razón obligando a ambos buscadores de Internet a suprimir o censurar determinados resultados.
Además, dicho mandato solo afectaba a las búsquedas locales, es decir, a las páginas de resultados de google.ar y Yahoo Argentina y no a los sitios globales de ambos buscadores (google.com y yahoo.com).
Una situación que guarda enormes paralelismos con la realidad actual en Europa donde precisamente se está desarrollando una importante batalla judicial entre los organismos garantes de la protección de datos y Google por el ámbito de aplicación del derecho al olvido.
Incluso, el aviso mostrado por Yahoo Argentina tras «ocultar» algunos resultados sobre Diego Armando Maradona es similar a los mostrados actualmente por los buscadores en Europa:
En estas sentencias de los tribunales argentinos se considera que los motores de búsqueda son responsables del tratamiento de los datos aparecidos en sus páginas de resultados, algo inaudito en aquellos años y que también se recoge en la sentencia contra Google publicada por el TJUE en mayo de 2014. De hecho, la aplicación se limitaba a los buscadores en Argentina al considerarse que la sentencia podía chocar con las leyes de Estados Unidos y la Unión Europea.
Tanto Google como Yahoo apelaron estas sentencias y desde el año 2007 (año de las primeras denuncias) hasta este mismo 2015 se han ido produciendo nuevas noticias sobre este caso bautizado como “el juicio de los famosos”. Los motores de búsqueda han conseguido resultados dispares en todas estas sentencias, ganando algunos casos pero siendo condenados a suprimir determinados resultados e indemnizar a los afectados en otros.
Llama la atención que en casos similares, por ejemplo, donde se relaciona a determinadas modelos con contenidos pornográficos, algunos tribunales den la razón a las demandantes obligando a los buscadores a eliminar contenidos mientras que otras sentencias consideran que los motores de búsqueda están libres de responsabilidad.
¿Existe o no el derecho al olvido en Argentina?
En derechoolvido.es nos hemos hecho eco de noticias donde cabría hablar de la aplicación de esta norma en el país sudamericano. Hace poco más de un año, se produjo que el que sí se habría considerado como el primero de estos caso en Argentina. Una sentencia donde la Dirección General de Defensa y Protección del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires insta a Google, Yahoo y Bing a la supresión de determinados enlaces al considerar que atentan contra el honor y la reputación de un ciudadano de la capital argentina.
Una sentencia que se ha repetido en ocasiones posteriores como puedes leer en este enlace: «nuevo caso de derecho al olvido en Argentina».
Veremos si en próximas sentencias o recursos, los famosos argentinos que estén envueltos en conflictos legales con Google, Yahoo y otros motores de búsqueda consiguen que en sus casos se considere que existe el amparo de esta norma que en Europa conocemos como derecho al olvido en Internet.